miércoles, 6 de octubre de 2010

ICNFI: Aquelarre panotxo (I)

Puesto que hay algún jugador (Jose, Felipe y parcialmente David) interesado en interpretar un personaje de origen murciano ahí van unos apuntes históricos de la región en el siglo XIV.





En 1355 la región de Murcia, como el resto del Reino de Castilla, una zona convulsa. La Peste negra, la ausencia de una autoridad fuerte, y las sucesivas razzias desde Granada o Aragón han provocado el despoblamiento de gran parte del territorio. Las tierras se abandonan, y resulta muy peligroso recorrer los caminos al carecer las rutas de lugares seguros donde pernoctar, por no hablar de la proliferación de contingentes armados que practican el bandidaje y la extorsión durante el día.

Los conflictos entre instituciones son frecuentes. Las villas grandes son pocas, y tan solo la de Murcia, y su concejo, planta cara a las arbitrariedades de la gran aristocracia (capitaneada por la familia Manuel, que posee un inmenso señorío y el título de "Adelantado", algo parecido al título de Virrey o Lloctinent). En otros lugares el conflicto surge entre las diócesis (principalmente la de Cartagena) u órdenes militares (Santiaguistas -frontera por Segura y Cieza- y Hospitalarios en menor medida -Calasparra-, poseen amplias encomiendas) y los pequeños nobles y oligarquías locales. La nobleza pelea deslizándose en quebradizas alianzas, los Fajardo, Calvillo, Ayala, Avilés... sirven unos días en el bando del Adelantado, otro en el del Alguacil Mayor de la ciudad, y un tercero en las mesnadas del Concejo... ni tan solo la amenaza sarracena los aglutina, puesto que en más de una ocasión han participado junto a los granadinos en las razzias que asolan la castigada región.

El influyente y poderoso príncipe de Villena Don Juan Manuel se intitulaba "adelantado de la frontera de murcia" y controlaba un extenso territorio ("podéis ir desde el reino de Navarra hasta el reino de Granada, que cada noche os hospedéis en villa cercada o en castillo de los que yo poseo" de su obra "libro infinido"). El Señor de Villena falleció en los terribles años de la peste negra (1348) siendo sucedido como heredero por su primogénito Fernando Manuel de Villena y Núñez de Lara, que sobrevivió tan solo dos años a su padre. Tan repentina muerte suscitó un grave problema en la región, el 2º Señor de Villena Fernando Manuel murió con 28 años dejando como depositaria de sus títulos a una niña de 7 años, Blanca Manuel... Sus antaño fieles clientelas nobiliares conspiran y luchan para hacerse con el "adelantamiento" o medrar a costa de la debilidad de la poderosa familia Manuel.